12 de septiembre de 2023

7 de agosto de 2023

189ª noche - Versión española:

LA CIGARRA Y LA HORMIGA 


En la conocida versión clásica, la hormiga trabaja a brazo partido todo el verano bajo un calor aplastante. Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno. Mientras tanto, la cigarra se ríe de la hormiga y pasa el verano haciendo turismo, bailando y yendo de juerga. Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita donde tiene todo lo que le hace falta hasta la primavera, mientras la cigarra, sin comida, tirita de frío. Y fin. 


VERSIÓN ESPAÑOLA


 1.- La hormiga trabaja a brazo partido todo el verano bajo un calor aplastante.

2.- Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno.

3.- La cigarra piensa que la hormiga es tonta... y se pasa el verano haciendo turismo, bailando y de juerga.

4.- Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita donde tiene todo lo que le hace falta hasta la primavera.


5.- La cigarra tirita en la calle, con otras de su especie. Un día, La Sexta organiza una encuesta en la que se pregunta: ¿por qué la hormiga tiene derecho a vivienda y comida cuando quiere,  mientras ella tiene frío y hambre?

6.- La Cuatro, las cadenas de TV estatales y la  SER organizan un programa en vivo en el que la cigarra sale pasando frío y calamidades y, en contraste, muestran extractos del video de la hormiga calentita en su casa y con comida en la mesa.

7.- Los españoles se sorprenden de que en un país tan moderno como el suyo dejen sufrir a la pobre cigarra, mientras otros viven holgadamente. 

8.- Las asociaciones contra la pobreza se manifiestan delante de la casa de la hormiga. TVE-1 transmite en directo la protesta.

9.- Los periodistas de El País y El Periódico escriben una serie de artículos en los que cuestionan cómo la hormiga se ha enriquecido a espaldas de la cigarra, e instan al Gobierno de Sánchez a que  aumente los impuestos a la hormiga.

10.- Respondiendo a las encuestas de opinión de El País y de las televisiones, el Gobierno de Sánchez elabora una Ley sobre la Igualdad Económica, en la que califica a la hormiga como una rémora despiadada del capitalismo y promueve por vía de urgencia un Decreto-Ley de Antidiscriminación Contra las Hormigas, con carácter retroactivo.

11.- Ian Gibson publica el libro: "Las hormigas y el franquismo", que el Gobierno  incluye en la asignatura de Educación para la Ciudadanía.

12.- Los impuestos de la hormiga han sido aumentados y además debe pagar una multa, porque no contrató a la cigarra como ayudante en verano lo que, además, se tipifica como "maltrato psicológico".

13.- El juzgado embarga la casa de la hormiga ya que ésta no tiene suficiente dinero para pagar la multa y los impuestos.

14.-  Finalmente, la hormiga se va de España, entre abucheos por insolidaria, mercenaria y traidora. 

15.-El equipo de investigación de La Sexta hace un reportaje donde sale la cigarra en la que fue la casa de la hormiga, con sobrepeso, pues ya se ha comido casi todo lo que allí había, mucho antes de que acabe el invierno. 

16.- La antigua casa de la hormiga se ha convertido ahora en un albergue social para cigarras, pero el lugar se deteriora rápidamente porque nadie hace nada para mantenerlo en buen estado.

17.- Al Gobierno se le reprocha no poner los medios necesarios para que el albergue prospere, por lo que  varios ministros ponen en marcha una comisión de investigación que costará 10 millones de euros.

18.- Belarra y Montero se manifiestan por Chueca en solidaridad con las cigarras homosexuales, lesbianas y transexuales.

19.- Entretanto, la cigarra ingresa en la UCI por una sobredosis de algo.

20.- La Cope y Telemadrid comentan el fracaso del Gobierno para intentar corregir el problema de las desigualdades sociales.

21.- La cadena SER, EL PAÍS, Iñaki Gabilondo, la tribu catalana del PSC y, por supuesto, Pedro Sánchez  dicen que la culpa de todo es de Feijóo, el covid, VOX, Ucrania, Franco y la Falange. 

22.- La antigua casa de la hormiga ha sido ya ocupada por una banda de arañas magrebíes, por lo que el Gobierno de Sánchez se felicita en la TV por la... "pluralidad cultural de España, ejemplo del éxito de la Alianza de Civilizaciones".

23.- Pedro Sánchez gana las elecciones por mayoría absoluta. 

4 de agosto de 2023

188° noche . MÓJESE, MAJESTAD

 ¡¡MÓJESE MAJESTAD!!


Fernando Savater, uno de los intelectuales más lúcidos y fiables que quedan, ha escrito en su columna de «El País», a contracorriente de la marcada línea del periódico: «Sánchez ha perdido las elecciones: por mucho que salte y vocifere, no está vivo sino mal enterrado». No es el único que lo piensa. Sánchez ha perdido las elecciones (Generales, Autonómicas y Municipales) es un cadáver político, aunque sea un cadáver engañoso, temerario, muy osado y falsamente alegre, que se resiste a estar muerto; el Rey no puede encargarle formar Gobierno. Sería un contrasentido. 


Estamos ante una grave crisis política, en la que lo que ha caducado, QUIEN HA PERDIDO, no está dispuesto a hacerse a un lado y lo nuevo, QUIEN HA GANADO, carece del empuje necesario para abrirse paso. El bloqueo está servido, para más escarnio, en plena presidencia española de la Unión Europea. Y lo más escandaloso es que asistimos a una obscena búsqueda de votos, a cualquier precio, por parte del perdedor de las elecciones para evitar su propio funeral.


Esta extraña circunstancia pone a prueba el reinado de Felipe VI. Ha llegado el momento de la verdad. Tendrá que demostrar su capacidad de arbitraje, con el riesgo, haga lo que haga, de que media España sufra una fuerte decepción y se vuelva contra la Corona. La gran pregunta que muchos nos hacemos en estos momentos críticos es: 


                                  ¿Puede encargar la formación de Gobierno a un político que ha perdido las elecciones y que se presenta en La Zarzuela con el aval de un fugado de la Justicia, que dio un golpe contra el orden constitucional, y con el voto de una serie de formaciones cuya razón de ser consiste estrictamente en acabar con la UNIDAD DE ESPAÑA y cargarse la Constitución, empezando por la Monarquía? 


La prudencia del Rey no consiste, pues, en conformarse con cumplir un engorroso trámite, haciéndose fotos en palacio a la puerta de su despacho con cada uno de los representantes de los partidos. El arbitraje exige actuar con tacto, pero con determinación, pensando en el bien de la nación… y lo que está claro es que el “bien de la Nación” no es entregar el PODER a quien lo quiere para destruir esa Nación. ¡Majestad, hay que salvar la UNIDAD de España, tiene que mojarse!

14 de mayo de 2023

182ª noche - Una pregunta...

 Ley Integral de Violencia de Género





Y ahora, ¿qué hacemos? ¿Dónde recurrimos? ¿Es esto una democracia, donde siete personas, incluso seis, deciden lo que es constitucional o no, arbitrariamente, descaradamente, absurdamente, sesgadamente, y no se puede hacer nada? ¿De qué vale la Constitución, si se interpreta de esta manera y bastan siete personas a las que ni siquiera ha votado nadie?

Lo mismo con cualquier otra ley o derecho. Al aborto, la eutanasia, etc.  La democracia está podrida. 







3 de abril de 2023

181ª noche - La epopeya del hombre

 

La epopeya de la Humanidad ha sido tan apasionante que estaría bien volver a repetirla unas cuantas veces más. 



Recuerdo que, en mi infancia, la mayoría de las unidades físicas de espacio, masa, tiempo, capacidad, etc. se hacían tomando como referencia datos tangibles. Algunas de éstas evolucionaron a una mayor exactitud, por ejemplo, el metro, que pasó de ser la diezmillonésima parte del cuadrante de un meridiano terrestre (definición de  1791 por la Academia Francesa de las Ciencias) a ser, en 1889, la distancia entre dos marcas situadas en una barra de platino/iridio que se conservaba en el pabellón de Breteuil en Sèvres, Oficina de Pesos y Medidas, a las afueras de París. Me parece curioso que en mis tiempos escolares, a partir de finales de los años 50, todavía se nos enseñara lo del meridiano terrestre aunque no estuviera ya en vigor, aunque también lo de la barra de platino. 

Estos cambios  tienen una fácil explicación: a medida que avanzan el conocimiento y las ciencias, se necesitan unidades de medida más precisas e inalterables. Sabemos hoy que el metro de 1791 no medía un metro, sino algo más. Y las barras metálicas, incluso las de aleación de platino e iridio, se dilatan, tuercen y pueden ser robadas o destruidas. Así que interesaba una definición exacta e inalterable. En 1960 se redefinió, en la 11.ª Conferencia de Pesos y Medidas: «Un metro es 1 650 763,73 veces la longitud de onda en el vacío de la radiación naranja del átomo del criptón 86». La precisión era cincuenta veces superior a la del patrón de 1889. Y aun en 1983 se volvió a redefinir, de nuevo en la  Conferencia General de Pesas y Medidas, esta vez la 17ª: ​ «Un metro es la distancia que recorre la luz en el vacío en un intervalo de 1/299 792 458 de segundo». 

Sin embargo, yo prefiero las dos primeras definiciones, las antiguas. La del meridiano, en los lejanos tiempos escolares, me recordaba a las aventuras de rusos e ingleses en el África Austral tal como las contaba Julio Verne en aquellos libros de Editorial Molino que yo leía por entonces. Era una referencia épica y romántica, algo que, sesenta años después, aún recuerdo como si acabara de aprender. «La diezmillonésima parte del cuadrante del meridiano terrestre». Menos evocadora era la definición de la barra de París, aunque no del todo exenta de romanticismo, con esa barra del metal más precioso y sus dos enigmáticas marcas, guardada en las entrañas de algún refugio secreto y seguro. Todo eso se ha perdido.






Se comprende, por otra parte, la necesidad de una medida exacta e invariable. Así, si algún día sucede algo catastrófico a la Humanidad, podrán recuperar nuestras medidas de siempre con total precisión. Los supervivientes, con lo que tengan a mano, sólo deberán medir la radiación del criptón 86, o bien calcular el metro a partir de la velocidad de la luz en el vacío. ¿Y cómo medir un segundo, se preguntarán? Muy fácil: un segundo es la duración de 9 192 631 770 oscilaciones de la radiación emitida en la transición entre los dos niveles hiperfinos del estado fundamental del isótopo 133 del átomo de cesio.  Puede que tarden unos cuantos miles de años, eso es probable. 


8 de enero de 2023

180ª noche - "Me cansé... me rindo..."

“Me cansé.. me rindo...”, se titula el artículo que desde hace tiempo se publica en redes sociales y medios de comunicación en español en un contexto equivocado. Cuentan que un profesor, Leonardo Haberkorn, acaba de renunciar a dar clases de periodismo en la Universidad de Uruguay a través de un emotivo texto publicado en un periódico local. La razón para su renuncia es el escaso interés que muestran sus alumnos, más interesados en mirar WhatsApp en su teléfono móvil. En realidad, el autor del texto es periodista, compartió su experiencia en 2015 en su blog personal (El informante) y un periódico la publicó de forma incompleta y sin su consentimiento. Haberkorn, corresponsal en Montevideo para la agencia Associated Press (AP), está ya acostumbrado a que su texto robado resucite cada cierto tiempo en otros países a través de las redes sociales, pero sigue mostrando sorpresa por la forma en la que ocurre. "Casi nunca me piden permiso para reproducir el texto ni me preguntan por él. Cortan y pegan sin apenas ubicar la información", dice a Verne a través del teléfono. Tras popularizarse en Uruguay a través de su blog personal, el texto de renuncia se hizo muy popular al año siguiente en Argentina, al publicarse en la conocida web Infobae. En esta ocasión, "están siendo medios de España, México, Colombia y Chile" los que cuentan la historia, tres años después, en la mayoría de los casos como si fuera actual. En la publicación original, que puede leerse de forma íntegra al final de este artículo con autorización de Haberkorn, el uruguayo explicaba su experiencia con dos grupos de alumnos a los que dio clase ese 2015 en una universidad de su país. "Cada vez es más difícil explicar cómo funciona el periodismo ante gente que no lo consume ni le ve sentido a estar informado", lamentaba entonces. "Supongo que mi nota resucita porque cuento cosas que son vigentes y universales", dice ahora a Verne.

Y en efecto, bien vigentes, universales y actuales son. Éste es el texto:

"Después de muchos, muchos años, hoy di clase en la Univer­sidad por última vez, Me cansé de pelear contra los celulares, contra WhatsApp y Facebook. Me ganaron. Me rindo. Tiro la toalla. Me cansé de estar hablando de asuntos que a mí me apasionan ante muchachos que no pueden despegar la vista de un teléfono que no cesa de recibir selfies. Claro, es cierto, no todos son así. Pero cada vez son más. Hasta hace tres o cuatro años la exhor­tación a dejar el teléfono de lado durante 90 minutos aunque solo fuera por educación todavía tenia algún efecto. Ya no. Puede ser que sea yo, que me haya desgastado dema­siado en el combate. O que esté haciendo algo mal. Pero hay algo cierto: muchos de estos chicos no tienen concien­cia de lo ofensivo e hiriente que es lo que hacen. Además, cada vez es más difícil explicar cómo funciona el periodismo ante gente que no lo consume ni le da importancia a estar informado.

Esta semana en clase salió el tema Venezuela. Sólo una estu­diante entre veinte pudo decir lo bá­sico del conflicto. Lo muy básico. El resto no tenía ni la más mínima idea. Les pregunté si sabían qué uruguayo estaba en medio de esa tormenta. Obviamente, ninguno sabía. Les pregunté si conocían quién es Almagro. Silencio. A las cansa­das, desde el fondo del salón, una única chica balbuceó: ¿No era el canciller? Así con todo. ¿Qué es lo que pasa en Siria? Silencio. ¿Qué partido es más liberal, o está más a la izquierda en Estados Unidos, los demócratas o los republicanos? Silencio. ¿Saben quién es Vargas Llosa?
"¡SI! "
¿Alguno leyó alguno de sus libros? No, ninguno. Lamento que los jóvenes no puedan dejar el celular, ni aun en clase. Conectar a gente tan desinformada con el periodismo es complicado. Es como enseñar botánica a alguien que viene de un planeta donde no existen los vegetales. En un ejercicio en el que debían salir a buscar una noticia a la calle, una estudiante regresó con la noticia de que todavía se venden diarios y revistas en las calles.
"Llega un momento en que ser periodista te juega en contra. Porque uno está entrenado para ponerse en los zapatos del otro, cultiva la empatía como herramienta básica de trabajo. Y entonces ve que estos a muchachos que siguen teniendo la inteligencia, la simpatía y la calidez de siempre los estafaron, que la culpa no es solo de ellos. Que la incultura, el desinterés y la ajenidad no les nacieron solos. Que les fueron matando la curiosidad y que, con cada maestra que dejó de corregirles las faltas de ortografía, les ensenaron que todo da más o menos lo mismo. Entonces, cuando uno comprende que ellos también son víctimas, casi sin darse cuenta va bajando la guardia. Y lo malo termina siendo visto como mediocre; lo mediocre pasa por bueno; y lo bueno, las pocas veces que llega, se celebra como si fuera brillante. No quiero ser parte de ese círculo perverso. Nunca fui así y no lo seré.

Lo que hago, siempre me gustó hacerlo bien. Lo mejor posible. Y no soporto el desinterés ante cada pregunta que hago y se contesta con el silencio. Silencio. Silencio. Silencio. Ellos querían que terminara la clase. Y yo también.




1 de enero de 2023